Teapanecos festejan en grande

Más de 5 mil almas presenciaron la celebración

Convoca el edil teapaneco, Raúl Cabrera a unirse a la fiesta del Bicentenario.

El día inició sin lluvias, pero con la incertidumbre de no saber si así sería todo el día 15 de septiembre para los teapanecos. Había llovido durante los últimos tres días y cada año, comentaban en las calles, llueve en los festejos del grito.
Hoy, dijo la señora margarita de la colonia el cerrito, será distinto, que habría novedad en la noche; que tenían que estar todos en la plaza del parque. El festejo lo ameritaba. Es el bicentenario del inicio de la independencia de México.
En punto de las 7 de la noche inicio el programa artístico cultural que el Ayuntamiento preparó. Desde las 5 de la tarde, padres de familias, niños y niñas, jóvenes universitarios que se han integrado al Ballet, ya estaban preparados.
A las 10 de la noche, se anunció el inicio del acto protocolario del grito de independencia. Era la primera vez que la administración que preside Raúl Cabrera realizaría el festejo patrio.
Allí, en el escenario preparado para el evento, subió el presidente municipal teapaneco acompañado de su esposa, Anie Michelle Hernández de Cabrera e integrantes del cabildo. Se presentaron los honores a la bandera y se tomó protesta a la nueva escolta municipal integrado por elementos de la Dirección de Seguridad Pública y la señorita independencia, Silvia Sánchez Cano.
Más de 5 mil habitantes presenciaban el acto en la plaza pública. Familias enteras que ya esperaban el arribo del presidente teapaneco al balcón principal. Todo estaba en orden. Se leía el acta de independencia a cargo del Secretario del Ayuntamiento, Ing. José Manuel Fernando Villar Ramón; abajo los teapanecos escuchaban con atención y respeto el documento que forma parte de la historia de México. La noche lució sin lluvia pero con la presencia de la luna que en todo momento dejó sentir la seguridad de que no llovería.
Tres campanas se dejaron escuchar. En el balcón principal ya estaba el Presidente Raúl Cabrera y su esposa Anie Michelle. Ahí, con el orgullo que todo mexicano expresa, inició el acto del grito de independencia: "Mexicanos, vivan los héroes que nos dieron patria y libertad..." El edil teapaneco levantó la bandera y al mismo tiempo dejó escuchar el sonar de la campana que adorna el palacio municipal. "Viva México, Viva México, Viva México!". Teapa vivió una noche de unidad y concordia y uniendo sus voces, los teapanecos entonaron el Himno Nacional Mexicano que erizaba la piel de los asistentes. Es la emoción, es el festejo...es el orgullo de ser Mexicanos!
Al ritmo de "El son de la negra", canción mexicana interpretada con mariachi, el cielo teapaneco ocultó su oscuridad para dar paso a las luces de la pirotécnica que, durante más de 10 minutos, ofreció su espectáculo. Todos participaron, niños, jóvenes, adultos, sin distinción de credos ni colores de partido. Allí estaban los Teapanecos, convocados por el presidente Raúl Cabrera.
El protocolo ha sido el mismo, la diferencia lo marcó la emoción de un presidente municipal que dejó escuchar su mexicanidad, su orgullo y alegría de ver convocados a miles de teapanecos que coreaban el VIVA de una historia de 200 años. De una historia de lucha constante para que cada rincón de nuestra patria sea digno para los mexicanos.
Raúl Cabrera dejó escuchar su compromiso y lealtad con los teapanecos, en cada " Viva México!". Allí, junto a el edil teapaneco y su esposa, estaba también un distinguido invitado del presidente municipal: el niño Miguel Obed Méndez Hernández, quien desde el pasado 3 de septiembre, a través de una carta enviada al presidente municipal, solicitó le cumpliera el sueño de estar en el balcón de palacio presenciando los festejos de independencia.
Ahí estaba. Junto a su presidente municipal. Junto a su sueño de niño y su emoción de mexicano.
Después, el presidente municipal bajó de palacio y caminó junto a todos. Allí compartió el baile, degustó bocadillos y jugó al "futbolito" con quienes disfrutaban de este juego de mesa. Caminó por el parque y disfrutó de la noche mexicana con música de banda que llenó el teatro al aire libre de la alegría de los teapanecos.
Allí, estaba el presidente que eligieron los teapanecos y que hace un año había iniciado una campaña para conjuntar un gobierno con valores que trabaja para cumplir los compromisos.