El olvidado teapaneco Don Tilo Ledesma

Compositor de canciones como "Doña esa", "El Tutupiche" y muchas más

La Gracia y Jerarquía de la Palabra De Un Hombre de Talento Indiscutible.
¿A caso los teapanecos no le debemos un merecido homenaje?

Por: Bartolo Jiménez Méndez y Daniel Becerra Conde

Don Tilo Ledesma? ¡Ay Tatita con la palabra a la palma de la mano ¡Desde sus tiempos de estudiante. Contador, platanero y muchas otras cosas, Tilo ha sido el juglar que ha convertido la palabra en un recurso de comunicación y acercamiento en un pueblo donde los habitantes hablan más en verso que en prosa y sus méritos son muchos, aunque, su pueblo, Teapa, como siempre ocurre, permanecen inéditos y eso no es justo para un hombre que ha ilustrado a tantas generaciones por medio del periódico, radio o en la calle donde se expresa con esa ingeniosidad que tanto encanta y conmueve a la gente.
Tilo Ledesma tiene una especial o singular manera, digamos, de ser en sus escritos que destila con ese característico humor que le conocemos como si la palabra y el hombre estuvieran enlazados por un cordón umbilical invisible y no hace ningún esfuerzo para desarrollar ese lenguaje que de lo regional choco se califica como universal y así, al estilo del gran Federico García Lorca, va tejiendo el puente de la palabra echa metáfora y rima que se aprecia por su resplandor.
La pregunta es ésta… ¿Acaso los Teapanecos no le debemos un merecido homenaje? Su periódico Tribuna, el informador de la Sierra tabasqueña, convoca para que realicemos un homenaje a la pluma creadora de don Tilo Ledesma, ahora, nada de recordar su memoria sino a lo presente, lo que vive y se encuentra activo en el mundo de las letras que se considera un deber ciudadano de reconocer y conocer a sus hombres que tanto lustre aportan al firmamento intelectual cuando los valores parecen ausentes y nuestra realidad social y política parece avanzar en sentido contrario dando tumbos en un campo de opuestos de una sociedad donde el crimen organizado parece imperar en sus horizontes, pero la fuerza de sus hombres y mujeres, su voluntad, tienen que salir adelante y eso ha ocurrido una y otra vez en Tabasco y sobre todo en Teapa, donde no sólo los grillos de la política pueden manifestarse en estampida para ocupar espacios.
Esa es la cuestión, diría Shakespeare, pero sobra la evidencias, por eso, le debemos un merecido homenaje a Tilo Ledesma, al contador, escritor, narrador o lo que usted quiera, pero al hombre que ha sabido reflejar todo ese continente de conocimientos en sus papeles que casi todo Tabasco ha leído o cuando menos escuchado en la letra de canciones y eso es lo que nos debe preocupar.
Hace algunos días el Gobierno del Estado a través del Instituto de Cultura de Tabasco organizó un merecido homenaje a nuestro paisano Tilo Ledesma, que pena que en Teapa en su natal municipio, no se le haya brindado ningún tipo de reconocimiento a este teapaneco distinguido o por lo menos lleve el nombre de alguna calle o avenida.
PARA SABER MÁS DE
DON TILO LEDESMA
Tilo Ledesma es originario de Teapa, Tabasco. Entre los 11 y 12 años de edad, el Licenciado Tomás Garrido Canabal -en ese entonces gobernador de Tabasco-, instala escuelas de música y entra a formar parte de la Banda que dirige el maestro Eugenio Flores Moreno estudiando solfeo.
Su inquietud por descubrir y aprender, lo lleva a la ciudad de Villahermosa, Tabasco con la idea de terminar la primaria. En ese tiempo no había escuelas nocturnas (1949) por lo que entra a la Academia Juan T. González donde estudia mecanografía y se emplea en una tienda que vendía instrumentos para el campo.
Tiempo después viaja a la capital del país para ser camarógrafo, pero como no existía esa carrera, decide estudiar arte dramático en el Instituto Cinematográfico de Radio y Televisión, dependiente de la Asociación Nacional de Actores (ANDA). Incursiona como actor de teatro pero para subsistir tuvo que desempeñar diversas actividades.
En México estudia la vocacional en el Instituto Politécnico Nacional y la carrera de Contador Público en la Escuela Superior de Comercio y Administración. Al terminar su carrera profesional decide trasladarse a Villahermosa, Tabasco donde se desempeña como contralor, contador y auditor en diferentes empresas e instituciones.
En el ambiente periodístico es conocido por sus epigramas, que él llama Egritoriales, palabra que dio título a su primer libro, editado por la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. Con estas formas expresivas, Tilo da cuenta del acontecer cotidiano de su ciudad, su estado, su país y el mundo, dando a las noticias un sentido chusco, satirizando a los personajes de la política y mostrando la nobleza del pueblo tabasqueño, con sus costumbres y tradiciones.
Como compositor, ha hecho música y letras de decenas de canciones serias y humorísticas, que han grabado diversos artistas locales, como el nuevo Choco Tabasqueño, Choco Nico, el Trío Usumacinta y muchos más.
Identificado más con el humor social, la crítica política y la ironía cultural, su labor literaria en la poesía no se había difundido y publicado, hasta que apareció la "Antología de poesía contemporánea de Tabasco", editada por la UJAT que también publicó su segundo libro titulado "Versos con reverso y sin colesterol", donde reúne, sus famosos egritoriales, tilogramas, poemas chuscos, festejos, parodias, notas folklóricas y algunos poemas serios. TRIBUNA reconoce el trabajo de Don Tilo Ledesma.