El PAN de la “Pequeña Lulu” y del “Mocho” Benítez

José Luis Pérez Rebolledo.

Tacotalpa, Tab. Marzo de 2014. En la entrega pasada les comentábamos acerca de los aspirantes adelantados del PRI y sus grillas, hoy le corresponde al PAN, ese partido que formó en 1939 Manuel Gómez Morín en la nación pero que ni los propios dizque panistas de Tacotalpa conocen su nombre ni sus ideales. Si uno les pregunta ellos responden: “Sabrá Dios que pata puso ese huevo”. Si no me creen pregúntele a La Pequeña Lulú (o sea al tal Lino Zentella) o a Moisés “Mocho” Benítez quién fue Gómez Morín o Manuel J. Clouthier y verán que no saben ni papas, ni siquiera saben que el PAN se formó para competir entre el oficialista Manuel Ávila Camacho y el panista Juan Andrew Almazán, y que si no hubiese sido por la matanza y el fraude electoral que instrumentó el presidente Lázaro Cárdenas del Río, hubiese triunfado el PAN. Y es que a ellos no les interesa conocer los orígenes, objetivos, filosofía, ideales, estatutos y plataformas del PAN, por citar alguna cosa, lo único que les interesa es sacar billetes, casas, carros, chicas, obtener el mayor lucro posible de los puestos políticos que puedan agandallarse en nombre del PAN. 

El PAN se formó como un partido de gente decente, honesta, culta, trabajadora, un partido que efectivamente quería el desarrollo y el bienestar de nuestra nación, pero desafortunadamente la inclusión de panistas corrientes, zafios, ambiciosos, capaces de vender su alma al diablo por un plato de lentejas, han venido hundiendo en Tacotalpa a ese partido político. El PAN, por lo menos aquí en Tacotalpa, sólo ha servido de barco para cumplirle sus caprichos a “candidatos de desecho” de otros partidos como Melesio Marcín, Juan Calcáneo o Daisy Marcín Hidalgo. Decimos candidatos de desecho porque fueron desechados por el PRI y entonces ellos en un acto de berrinche se fueron a los brazos opositores. Pero como tampoco los quiso el PRD, se fueron a refugiar a una lejana tercera opción, el PAN. 

Y lo único que lograron fue quitarle votos al PRI e invertir su dinero para que candidatos de representación proporcional como Héctor Lino López Zentella, mejor conocido en el bajo mundo como “La Pequeña Lulú”, Moisés Benítez alias “El Mocho Benítez”, llegaran a ser regidores del PAN en el ayuntamiento de Tacotalpa, y con el mayor descaro posible, con el cinismo adornándole el rostro, entraran en negociaciones y componendas con los presidentes municipales en turno, y así cobrar jugosos sueldos, construir casas, comprar carros y demás. Eso es lo único que ha conseguido el PAN en Tacotalpa, lograr poner como regidores a perfectos pillos que traicionando los orígenes, los ideales del panismo, se han enriquecido y dado a los placeres de la güeva. Si no pregúntenle a la “Chiquita Lulú” que abandonó a su familia por otra chiquita o a Benítez que adquirió carros y negoció puestos de trabajo para sus hijos.  Ese es el panismo en Tacotalpa, una guarida de corruptos. Sólo por la enorme corrupción que hay dentro del PAN en Tacotalpa, se explica que la “Chiquita Lulú” haya sido dos veces regidor (un tipo que ni siquiera terminó la secundaria porque le aburrían las clases), que haya pasado de taquero a honorable regidor del ayuntamiento, de monta bicicleta a propietario de carro, de merolico de banqueta a gestor de las necesidades del pueblo. 

Y como dos víboras no pueden estar metidas dentro del mismo costal, hoy Moisés Benítez y Héctor Lino se pelean el control del Comité del PAN en Tacotalpa, saben que se aproximan las elecciones de 2015 y no quieren quedarse fuera de la jugada. Por eso dice la gente de Tacotalpa que ya dividieron el PAN en dos bandos: Los Chiquitiados (o sea los seguidores de la Chiquita Lulú) y los Mochileros (los seguidores del Mocho Benítez). ¡Y aarrrraaaancan! ¿Quién ganará? Los Chiquitiados o los de la Mochila Azul. ¿Los de ojitos dormilones? o ¿Se quedarán con gran inquietud y con bajas calificaciones? Ya ni a la oficina quiere doña Olga llegar, no se contenta con nada, no puede leer ni escribir, le hace falta su mochada. Hay que decirles que se pongan la del Puebla porque estos hijos del averno no de Gómez Morín, todo lo quieren para ellos. Y si lo quieren todo, pues dénselo todo, de la mitad pal´tronquito…de brazo que le quedó a Benítez, no sean mal pensados. Porque según andan diciendo los panistas por ahí, un tal “Gato” les puede comer el mandado. Por eso ya andan viendo que aspirante, de esos que aspiran con ganas, se queda inconforme con su partido para que ellos se lo llevan al PAN y postulen otro desecho más. Total, ellos lo que quieren no es ganar la presidencia o la diputación, lo que quieren es la regiduría “pluri” o cualquier otro huesito por ahí. Y para ello necesitan un candidato lo suficientemente tonto y ardido para que ponga su dinero y ellos finalmente cachen puestos y ya no sigan vendiendo tacos de perro o pintando bardas, sino que vengan las chicas,  las cheves y la dolce vita. Ajuaa.