Pedro Jiménez Torres
Dentro de las actividades e investigaciones que nos parecen importantes en la línea editorial de TRIBUNA, la de las Flores de Tabasco, nuestras bellas mujeres, nos ha parecido un importante tema sobre todo para este municipio serrano que lleva en su haber 10 Flores de Oro dentro de los certámenes de belleza en las Ferias de Tabasco que año con año se realizan. Hoy por hoy, y ya entrado en los los preparativo de la feria anual de los tabasqueños, presentamos un trabajo inédito, de mucho valor histórico en este rubro; le presentamos una semblanza histórica que en el caso de la bella Graciela Padrón Wade, es excepcional como la de aquella otra belleza que no aparece en las flores de oro que han conquistado las mujeres teapanecas. Y es que hay una sencilla razón para el caso de Graciela: su familia se fue a vivir a la ciudad de Villahermosa y por ello, un día de los de 1930, fue elegida para ser y representar por el municipio de Centro, lo que en aquél tiempo se le llamaba “Flor de Amor”. Lea los textos históricos que hoy le ofrecemos como parte de una investigación especial para TRIBUNA y apoyada del libro “Villahermosa Nuestra Ciudad” del autor Geney Torruco Saravia.
“Graciela Padrón Wade, nació en Teapa, Tabasco, el 15 de enero de 1913; hija de Feliciano Padrón González y Candelaria Wade Ivis. Terminó su instrucción primaria superior a los 14 años en el Instituto “José N. Rovirosa del profesor Arnulfo Giorgana. Fue “Flor de Amor” por el municipio del Centro en la Segunda Exposición Regional Tabasqueña, celebrada del 5 al 12 de febrero de |930 en la capital del estado. “Chela”, como la llamaban sus familiares y amistades, contrajo matrimonio el 19 de de enero de 1931 con el ganadero zapatense César Abreu Ochoa y procrearon seis hijos: Amada, Norma, César, Magda Graciela, Elsy del Socorro y Humberto”
El miércoles 5 de febrero de 1930,a las diez horas, el Gobernador Interino Isidoro María Díez, inaugura la “Exposición Regional Tabasqueña”. El sábado 8 de febrero, Tomás Garrido Canabal, ofrece una comida a todas las embajadoras denominadas en aquel tiempo “Flor de Amor”. Ahí se encontraba Graciela representado al Centro, mientras que por Teapa, se encontraba la bella Edelina López.
La exposición de clausuró el miércoles 12 y las “Flor de Amor” fueron despedidas al pie de sus ventanas con serenatas en la noche del jueves 13 con la voz de Pedro Gutiérrez.
El Gobernador Ausencio C. Cruz envió un mensaje lamentado no poder estar presente por cuestiones de trabajo en la ciudad de México en donde asistió a la ceremonia de posesión del Presidente Pascual Ortiz Rubio. En Tabasco, mientras, el Presidente municipal del Centro, César A. Rojas, en ese entonces, obsequió a la señorita “Flor de Amor”, Graciela Padrón Wade, una esclava trabajada en oro de 18 kilates con distintos colores de esmaltes y con la inscripción: ”Exposición Regional Tabasqueña 1930, Graciela. Flor de Amor. Centro”.
Esto es lo histórico pero aparte, hay que recordar que la bella teapaneca Sofía Cano Calcaneo, en ese entonces fue “Mensajera del Progreso”, a como se le llamaban a las embajadoras de la época. Posteriormente, se les llamó a como ahora, “Embajadoras”. A como vemos, Teapa, tiene mucho material en este tipo de atractivos. El dato fuerte de Teapa, es que se reconocen a 9 embajadoras como “Flor de Oro” o “Flor más Bella de Tabasco”, aunque con Sofía Cano Calcaneo, serían diez las que han ganado el máximo galardón de la belleza tabasqueña. Aparte, a como se lo contamos, Graciela Padrón Wade, Teapaneca que fue representante del municipio del Centro en 1930. Un tema de gran interés.
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