Joven señora embarazada muere por negligencia médica en hospital de Teapa

• Madre e hija fallecen durante la llegada de la Navidad

Pedro Jiménez Torres

Hasta la mesa de redacción de TRIBUNA llegó el señor Moisés Hernández Pérez, de oficio campesino, para denunciar con dolor y enojo lo que le había pasado en el hospital General de Teapa en días pasados, y esto, lea usted, nos lo contó con un patético cuadro de dolor y tristeza:

 Que su esposa  de 33 años, Brunilda López García(con dos hijos menores de edad), en pleno estado  de embarazo avanzado, se sintió mal, con dolores y  ya muy noche,  la trasladó hasta el Hospital General Nicandro L. Melo de esta ciudad de Teapa, provenientes de su comunidad “Las  Gaviotas” Juan Aldama  de este municipio, aproximadamente a eso de las 11 de la noche del 24 de diciembre del pasado año 2014, siendo recibida por la parte de “Urgencia” de dicho Hospital por el Médico Tilo Cornelio Gómez que se encontraba de guardia. Al parecer del galeno, la joven señora se encontraba en situación normal de su estado de gravidez,  y se percató y se le dijo que había llevado su procedimiento de control de embarazo, por lo que la llevaron hasta la cama número 1 en calidad de internada y esperar el momento médicamente indicado para  entrar a los momentos del parto.

 Desde esa hora la señora Brunilda se quedó en dicha cama; ahí pasó la Noche Buena que otros festejaban y vivió las otras horas del día 25, día de la Navidad, para que a eso de  las dos de la tarde en pleno día del nacimiento del niño Jesús, y ya siendo casi las cuatro de la tarde,  llegó el Doctor y auscultándola, ordenó de inmediato  meterla a la sala de operaciones para intervenirla por su estado crítico que se supone no tenía en menos de 24 horas puesto que ella ingresó a las 11 de la noche del día anterior y se dijo lo contrario.  Pareció extraño que el Doctor Tilo Cornelio, de la sala de operaciones saliera en no menos de 40 minutos para dar aviso a los familiares, al esposo de la señora,  Moisés  Hernández y a la suegra, de que la joven parturienta había fallecido y que la recién nacida se encontraba en estado crítico de gravedad y propensa que falleciera también, por lo que  de inmediato en una ambulancia la trasladaron hasta el hospital Dr. Juan Graham Casasús, en Villahermosa, donde el personal médico no pudo hacer nada por la recién nacida la que falleció en ese hospital de Alta Especialidad. La opinión de algunos médicos de tan prestigiado centro médico -dicen los quejosos- que todo había pasado por “causas de negligencia médica”.  Si en menos de 40 minutos de entrada al quirófano  se agravó y muere la señora y la niña lo mismo, grave, en menos de 24 horas todo esto sucedió en el único Hospital General de la Región Sierra ubicado en Teapa, Dr. Nicandro L. Melo, un presunto homicidio por negligencia según nos cuenta que escucharon de los doctores de Villahermosa. Fue tanto el coraje, odio  e impotencia de la suegra, que comentan que hasta dos cachetadas la suegra le dio al Doctor Tilo Cornelio de este hospital cuando les avisó del percance. Además –mencionan los familiares de los difuntos- la joven señora Brunilda López y la recién nacida que era obviamente una niña, que a la nena  le notaron cortaduras en sus mejillas. El documento que certifica la muerte de la señora dice textualmente: muerte por “insuficiencia respiratoria debido a una tromboembolia pulmonar”. El intervalo de la aparición de esta inesperada enfermedad que por raro que parezca no dio signos de tener, aparece 15 minutos antes de que muriera la señora Brunilda López. 

No es la primera ocasión que suceden estas cosas que demeritan más dicho hospital que toda la gente conoce como “El Hospital de la Muerte”, el propio 24 de diciembre del 2014, pasaron otros incidentes de gravedad que conocemos y que la humilde gente ya no se atreve a denunciar por temor a represalias. ¿Los culpables? ¿Los Hay? ¿O no hay culpables? ¿O el simple diagnóstico firmado (folio 140744277) por el director de dicho centro médico de Teapa, Doctor Flores, asegura la impunidad de responsables por negligencia dolosa?

Mientras, en la comunidad de las Gaviotas de Juan Aldama, en ese hogar no nació el niño Jesús según nuestras tradiciones; ahí se velaron dos cuerpos, la de la madre Brunilda López García y la de la pequeña recién nacida, la nena que tanto esperaba su mamá de tan solo 33 años de edad. Ahí no nace nadie: dos muertes atribuidas a esos exóticos nombre como el que pusieron: “Insuficiencia respiratoria debido a una tromboembolia pulmonar”. ¿Qué les puede decir esto a los familiares de las difuntas? Dos niños de 16 y otro de 12 años en la orfandad. ¿Ese es el “Tabasco Cambia Contigo”? ¿Y el doctor Tilo Cornelio, el Dr. Flores, el personal de urgencia? Aquí no pasó nada. Unos muertos más dentro del desorden que es este hospital. Los familiares se opusieron a una autopsia ¿Hasta cuándo? Se lo dejamos como tarea a todos.