Grilla

REGIDORES JALAPANECOS MAICEADOS

La ambición de algunos de nuestros políticos aldeanos parece no tener llenadera, como en el caso de la pareja presidencial del municipio de Jalapa, cuya mala sangre ha contaminado a todo el Ayuntamiento. Y vean si no, estimados lectores… En la anterior edición reseñamos que algunas administraciones cerraron el año con fuertes deudas e inclusive muchos burócratas se quedaron sin aguinaldo y los proveedores sin su pago, obras inconclusas. 

Resulta que nos hicieron llegar a esta TRIBUNA PÚLICA evidencias de que la alcaldesa Esperanza Méndez Vázquez, en contubernio con su esposo el síndico de Hacienda Fermín Torres Sánchez, manejaron a su antojo el presupuesto del municipio y el desorden administrativo terminó en lo que ya mencionamos. ¿Y los regidores? Bien, gracias. Parecen estar pintados, nada más son una carga para el pueblo porque no exigen, no reclaman, ni defienden los intereses de sus gobernados. Pero cómo van a ponerle un hasta aquí a los depredadores del dinero público, si también ellos reciben su tajada del pastel y agachan la cabeza dócilmente, sabedores que son cómplices del latrocinio. 

¿O cómo se le podría calificar al hecho de que todos los regidores cobraron entre 95 y 114 mil pesos de aguinaldo, mientras que a los directores, coordinadores, jefes de departamento y de área, entre otros funcionarios, se quedaron como el chinito, nomás milando, mientras que a otros se los dieron a muy duras penas y además una miseria de aguinaldo. ¿Qué pasa con los regidores de oposición? Se preguntarán nuestros indignados lectores. Efectivamente, el “honorable” Cabildo de Jalapa cuenta con dos regidores plurinominales del PRI, peeeeeero les tenemos malas noticias: también ellos están “maiceados”. Ni María del Carmen Pantoja Cárdenas (onceava regidora), ni Adrián López Avilés (doceavo regidor), han dicho pío; están chitón, no hacen olas porque también ellos recibieron su jugoso aguinaldo y le entran sabroso al banquete presupuestal. ¿Y el pueblo? ¡Que se joda, para qué se deja!  

 FUEREÑOS INVADEN AYUNTAMIENTO DE JALAPA Y DESPLAZAN A CRIOLLOS

En los tiempos de campaña, Esperanza Méndez se comprometió a integrar su gabinete con puros profesionistas y técnicos oriundos del terruño, para dar oportunidad al desarrollo de criollitos y practicar la doctrina Monroe en chiquito (Jalapa para los jalapanecos), porque empezando este año le dio cuello a tres de sus directores de primer nivel para ceder esos espacios a fuereños que no parecen traer mucho en el morral. Tal es el caso de José Luis Delgado Serra, importado del municipio de Cunduacán, quien entró al relevo del local Edy Cárdenas Palomeque como director de Obras Públicas. La pareja presidencial dio un segundo golpe al paisanaje al mandar a volar a la contralora Marta Laura Cárdenas Ascencio para darle su lugar al paraiseño Ángel Cruz Sánchez; de igual manera le dieron la viada a Carlos Manuel Cámara López en la Dirección de Programación y le otorgaron la plaza a Renán Trinidad García, también de Paraíso… Tanto que se criticaba a Luis Deyá Oropeza (a) El Pavo, que armó su gabinete con puro fuereño y ahora estamos igual o peor. Con justa razón, el pueblo cuchichea que nada más falta que traigan a la tumbapatos Aura Lluvia García para completar el cuadro de la legión extranjera, tal y como hizo El Pavo, quien premió a la susodicha con la tesorería municipal. Ta cabrown, con esta gente nomás no se puede… Piores cosas veremos, dijera la viejita.  

CIRCULO DE CORRUPCIÓN ENTRE COMPADRAZGOS Y PARENTELAS

Seguimos con la tierra del dulce, que esto va pa’ largo… ¡Vaya, vaya, vaya! Con la novedad de que ya salió el hilo de la madeja por donde se amarra el círculo de la corrupción. Resulta que la pareja presidencial, o séase la alcaldesa Pelancha Méndez y su consorte que es el verdadero poder tras el trono, Fermín Torres, quien funge como síndico de Hacienda, son compadres del tesorero Reyes Ascencio Hidalgo, quien a su vez es tío del encargado de la Unidad de Transparencia, José Luis Cornelio Sosa. O sea que la red de corrupción está muy bien armada, veamos si no: La presidenta municipal es la que da la orden ejecutiva para un movimiento financiero; pero por ley todo tiene que pasar por el síndico de Hacienda, que es el marido de la presidenta. El ejecutor de la orden es el director de Finanzas y el encargado de maquillar cualquier rastro de estiércol es el de Transparencia. Así que el hilo de la corrupción recorre un camino con cuatro estaciones principales: Presidenta-Síndico-Tesorero-Transparencia... Negocio redondo, ni duda cabe.  

Y CONTINÚA LA PODREDUMBRE CON MOCHES Y LICITACIONES AMAÑADAS

Ya que andamos por los terrenos de las corruptelas que se hornean como pan caliente todos los días en Jalapa, resulta ser que el peine sacó otros piojos y liendres de la Medusa con su cabellera venenosa. Fuentes al interior de la administración municipal nos revelan la podredumbre que subyace en el gobierno que preside doña Pelancha. Resulta que las licitaciones están amañadas para que siempre sean ganadas por los hoy contratistas favoritos de un pez grande de la polaca chocoslovaca. Todas las obras federales que se han ejecutado en el municipio jalapaneco, que por cierto fueron aterrizadas por intermediación del diputado federal Candelario Pérez Alvarado, son ganadas por constructoras de Cárdenas y de Huimanguillo. Peor aún, aparte de exigir el riguroso diezmo (que oscila entre 16 y 20 por ciento), muchos de los trabajadores son de estos municipios. ¿Cómo ven? Sí que está gruexxxa la corrupción por esas tierras dulceras.  

CIUDADANOS PAGAN LA SEGURIDAD PRIVADA DE LA PAREJA PRESIDENCIAL

El colmo de colmos en Jalapa es el cinismo de la pareja presidencial que ante el incremento de la inseguridad que prevalece en el municipio, en vez de invertir en equipamiento y capacitación de los cuerpos policiacos, optaron por la infamia de reforzar su seguridad personal y la de su familia, con costo al erario de los jalapanecos. Y es que a donde quiera que vaya el síndico de Hacienda, le andan cuidando las espaldas dos o tres guaruras; lo mismo en el caso de la presidenta municipal, que tiene asignados a otros tres escoltas para su seguridad. Pero donde sí ya se la jalaron es en el caso de su hijo, que también es resguardado por otros tres guaruras, haciendo un total de diez elementos de seguridad que deberían atender a la población pero están ocupados en su tarea de niñeras, perdón, de escoltas… Estamos conscientes que por la naturaleza de su encargo, la alcaldesa sí es pertinente que tenga una guardia personal, pero que su marido y su hijo también gocen de este privilegio con cargo al presupuesto público eso sí encabrona. Y mientras tanto, el pueblo que siga sufriendo los embates de la delincuencia. Total, con unas despensitas en tiempos electorales se conforman… Y mejor nos despedimos, antes de que nos dé diabetes de tanto dulce que comemos por estos lares. Ahí nos vidrios en la próxima edición, si el de Arriba nos lo permite. Adiuuuuuu