Frenará IFE estampida de adelantados
Los actos de indisciplina electoral oscilarán de la amonestación a la inhabilitación para participar en las jornadas que se avecinan.

Por BARTOLO JIMÉNEZ MÉNDEZ

Hablar de cómo andan las cosas en política en Tabasco no es hacer futurismo, sólo vil rutina; una cosa es observar el panorama de manera pragmática y otra hacer handicap en la compe­tencia donde todavía el IFE no da el banderazo para el inicio de las precampañas. Por lo tanto, la feria de los adelantados está violando la ley reglamentaria, los estatutos de ese organismo árbitro que, a decir de la Vocalía Ejecutiva del organismo electoral ciudadano, Ana Lila Pérez Mendoza, todo aquel que se indiscipline se le fincarán responsabilidades en primero, segundo y tercer grado, hasta considerar los extremos de la inhabilitación temporal de sus derechos políticos.
Las medidas serán proporcionales a las acciones que se cometan en contrario, debido a que se deben conservar las formas, si bien no estrictas sí lo más apegada al margen de acción que permiten las leyes electorales que ahora han reducido los tiempos de campaña y el control de la propaganda que se utilice para que las jornadas electorales preparatorias y normales se desarrollen dentro de un marco de equidad e imparcialidad que permita las mismas posibilida­des para todos los aspirantes, que deben cubrir la etapa de consenso interpartidista y la selección de precandidatos triunfantes. Todo eso.

Campañas abiertas
Las campañas por los puestos de elección popular: diputaciones locales y federales y de alcaldes, se encuentra a tope en todas las municipalidades y no hay manera de parar la estampida donde los estándares de participación con ventaja la imponen los legisladores locales, colaboradores del alcalde en función y las diri­gencias partidistas, con los agregados infaltables de los que representan grupos facciosos que amenazan con ofertar su capital político, por escaso que éste sea.
En las marquesinas aparecen los nombres de aquellos que se sienten con los suficientes méritos representativos para encabezar fórmulas electorales, y lo cierto consiste que esas inten­ciones no han nacido de manera espontánea, representan una prolongación de jornadas polí­ticas anteriores que quedaron en estado latente y que ahora, por nuevos estímulos, reaparecen en el escenario; es decir, las campañas políticas no concluyeron con la designación del candidato, estuvieron vigentes todo el tiempo.
Para un simple ejemplo que ilustre lo que se dice, tenemos en la Sierra al municipio de Teapa, donde el caldero político se encuentro a temperatura alta, y como la mayoría de los que pujan por la alcaldía son personas de posición económica desahogada, no tienen problemas en el renglón de financiamiento en sus reuniones, que son actos de proselitismo político disfrazado de cumpleaños, bodas de plata, convivios, ága­pes y toda la cosa que refleja el apego tan fuerte que tienen al poder y eso, en sus variantes, le imprimen un colorido festivo, pintoresco, en un intercambio permanente de críticas que resaltan las cualidades de cada uno. Por ejemplo, a Henry Oropeza le llaman “El Chulo”, “El Muñeco” o “El Maniquí”, debido a que siempre anda elegante­mente vestido, un figurín, impecable.
El catálogo es amplio y hasta gracioso, cuando a Constantino Cano lo identifican como ”El Eterno”, “El Cacique” y otras linduras de adjetivos que, por cierto, no agradan a Gerardo León, potentado terrateniente y monopolista del transporte urbano y rural, quien odia que le digan “El Peón”; por esas mismas andan el legislador Raúl Cabrera Pascacio (quien parece que ya unió a todos ¡pero en su contra!), Rosario Vega Alva­rado, Hilda Santos Padrón, Julio César Pedrero, Joseíto del Águila Beltrán, Adrián Prats Leal, entre otros, en lo que corresponde al PRI.
En la otra ala, las ambiciones por igual están desbordadas, con Mónica Fernández Balboa, hoy legisladora federal y mujer con buena estrella con los antecedentes de su belleza que la llevó a lograr la “Flor de Oro”, en la Feria estatal y que dio un campanazo de otra suerte que provocó el efecto Obrador, para superar a Luis Felipe Graham en el VI Distrito electoral, en un resultado que en jornada normal habría sido verdadera­mente inusitado. Se agregan a esta lista Rafael Abner Balboa, Carlos Mario Ocampo, Germán García y Antonio Sánchez, entre otros.
Lo cierto es que la opinión pública se encuen­tra volcada y las inclinaciones partidistas son visibles; por lo tanto, el ambiente se encuentra en plena efervescencia y parece inevitable. No obs­tante, la opinión de la vocal ejecutiva del IFE, que ante la inexistencia legal del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Tabasco (IEPCT), que se encuentra en la etapa de seleccionar a cuatro miembros sustitutos, carece en estos momentos de facultades de intervención ante la anarquía que se presenta en los aspirantes que sin importar los momentos difíciles que ha vivido Tabasco durante el presente mes, atienden mejor al monto de sus ambiciones políticas.

Jalapa y Tacotalpa
En Jalapa las cosas no son menos y, lo mismo que las corrientes incontrolables del río de la Sierra, los aspirantes se encuentran en plena labor de la suma de efectivos electorales. Resultan sintomáticos las tramas y artificios utili­zados por el diputado, Víctor Manuel Domínguez Sarracino, quien para estas alturas ya tiene todo el tinglado prepara0o en la confianza que sus alianzas le reportarán los resultados que espera y el aspirante, olvidado de sus responsabilidades camerales, tiene la vista puesta en la alcaldía que ahora detenta Antonio Priego Jiménez.
El edil a su vez mantiene vivas las esperan­zas de Renán Pérez Martínez, secretario del Ayuntamiento, que será la carta que se juegue contra los otros competidores, como Jorge Avendaño, Ramón Isidro Gómez y Elías Pérez Feria, pero el obstáculo que encontrarán es la presencia de un candidato natural que no hace política pero es conocido por todos: Fernando Oropeza Correa, quien no anda regalando cosas para condicionar a los jalapanecos para que lo apoyen sino que está haciendo seguimiento de los trastornos sociales provocados por las inundaciones. Oropeza Correa no pide fidelidad debido a que los habitantes lo conocen y ya saben de su trabajo como servidor público y no solamente en los tiempos electorales sino en cualquier momento, y no hay mejor cosa de identificar a la gente que por su trabajo.
Aquí ya se tiene la triste y dolorosa experien­cia de Edisson Hernández Pinto, que encantaba con sus palabras y promesas, lo mismo que Do­mínguez Sarracino (hasta parecen cortados por la misma navaja), y después, cuando arriban al poder se transforman, cambian de piel, son otros. Por eso hay que tener mucho cuidado con los lobos con piel de cordero, así se la pasen repar­tiendo artículos para uso doméstico de plástico, ya que en el ejercicio del poder sólo atienden a sus amigos personales y a la gente le huyen, ya que sólo le quitan el tiempo. Y Como dijera el mismo Edisson: “Estos nomás vienen a pedir”.
En Tacotalpa la lista de aspirantes la enca­beza Ulíses Solís López y los estira y encoje se encuentran a la orden del día, con Yenny Rodríguez Aguilar, Manuel Hernández Govea, Santiago Méndez Arpáiz, Maricruz Román, que son los identificables y que cubren el universo municipal que hasta el momento ha adminis­trado con acierto el alcalde Pedro Palomeque Calzada.
Así como se encuentra la Sierra, en plena efervescencia electoral, se encuentran todos los municipios, donde las posibilidades de alianza con otros partidos que a la vez se enrolan en el protagonismo electoral con candidatos propios, como sucede con el PAN, Convergencia, PT y Social Demócrata, que no representa otra cosa que mayor actividad y competencia ante las fórmulas tradicionales; pero en fin, así de controvertida se encuentra la cosa aun cuando el IFE, a través de su Vocalía, indica que se castigarán las indisciplinas. Yo, por lo menos, eso lo pongo en duda.

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