Comentarios del Lic. Gonzalo Beltrán Calzada

C. Cinthia del Carmen Gómez García, coordinadora de la carrera de Psicología de la División de Ciencias de la Salud de la UJAT.
Leí la primera entrevista que le hizo la reportera Cecilia Vargas para La Verdad del Sureste y estoy muy de acuerdo con sus puntos de vista en lo que se refiere a la despenalización del aborto. No voy a opinar desde el punto de vista que hace usted como psicóloga pero cuando menos no padezco de la frialdad de la razón.
Mire usted: el aborto debe despenalizarse y autorizarse constitucionalmente, pero claro, un aborto dentro del marco de la ley porque nuestra Constitución es liberal y todas la leyes emanan de ella y no se puede legislar contra la voluntad de un ser humano si su acción es dentro del marco de una norma social de la salud, y como usted expresó en esta primera entrevista: ¿Qué hace una mujer que tiene dos hijos y fue abandonada por el amasio, querido o esposo y ahora, como lo hacen pocas, trabaja para mantenerlos y educarlos dentro de la humanidad que ha perdido los principio éticos?. Ella es joven y por una exigencia del sexo por ahí sufre otro embarazo, ¿va a desear tener otro hijo, si para estos dos todavía no tiene futuro? Ella debe encontrar un camino que la favorezca y resuelva su situación, ¿y a qué recurre? Pues al aborto.
Esto lo debe legislar el congreso, pero ofrecer una legislación fácil, porque la mayoría de estas mujeres son atrasadas y muy penosos para ir a expresar su caso ante un profesional y recurren ante las nombradas brujas o parteras que se creen autorizadas. Y ¿qué sabe una de ellas sobre un legrado quirúrgico para llegar al aborto? pues debe haber no un programa de control o planificación (como usted dice) sino una institución gratuita dedicada a estos menesteres y no legislar para darle 700 pesos mensuales a la que en contra de su voluntad ya lo tuvo, o a la que también lo buscó cuando llegó a los treinta y cinco años sin hijos. A esa edad y en esas condiciones busca el macho, pero éste es el medio, el fin es el hijo.
Además, doctora Cinthia, ¿cómo habrá un autocuidado de la sexualidad si ni la mujer instruida sabe poco más o menos el día o la hora que pueda tener un embarazo por el acto sexual? Pues mucho menos la cocinera de la casa de Juan Pérez. Así, es mejor que se dé enseñanza obligatoria a mujeres para que algo sepan sobre el folículo de Graff u óvulo fecundable. Ahora, eso de atención psico-emocional explíquelo por que yo no soy psicólogo; y de que vayan a tomar el aborto como un anticonceptivo ya se lo explicará como lo del sentimiento de culpa.
También lo de la despenalización del aborto lo ha estado machacando el más alto prelado clerical, metiéndose en asuntos jurídicos en vez de predicar la fe, que es lo único que les corresponde, pues las pobres mujeres, principalmente las casadas, lo ven con angustia porque creen que asesinaron a alguien.
Le interrogaron a usted con respecto a cuándo se puede hablar de vida sobre el mal llamado producto. En mi opinión, el que se mete a asegurar algo sobre este tema no sale triunfante. Usted explicó muy bien por cuanto a la comparación de los animales. Yo digo que aquellos, no tienen conciencia de vida porque ni hablan ni razonan.
Qué bien le dijo usted a los curitas que cuando una mujer ocurre al aborto no está asesinando a nadie, está impidiendo su formación.

OTRO COMENTARIO
Me voy a un comentario distinto. Voy a elogiar al ciudadano presidente municipal, Rafael Darío Calzada Balboa por los semáforos, que muy buena falta hacían. Sólo falta el de la entrada del mercado (la mejor obra del Dr. Vicente Cano) allí por donde está la Mujer Desnuda, esa que puso el ex presidente “Necho” Balboa.
Pero en cuanto a topes no lo voy a elogiar, porque ese que pusieron frente al hospital debería estar más bajo. A los vehículos bajitos se les monta la barriga y quedan en el aire. Allí quedo el del Dr. Cano. ¿Sabía usted que la cultura de los pueblos se mide por la cantidad de topes que tienen?
P.D. El Dr. Juan Vicente para entrar al Hospital se va por el Boulevard.

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